Los restos mortales del cabo del Ejército Feliciano Vegas, fallecido en el accidente del Yak-42 el 26 de mayo de 2003, llegarán esta semana a su municipio natal, donde recibirán sepultura.

El Juzgado Central de Instrucción número 3 de la Audiencia Nacional ha entregado al bufete contratado por la Asociación de Familiares de Víctimas del Yak-42, los informes de los forenses y los estudios antropológicos realizados a los cadáveres de los 21 militares mal identificados tras el accidente de Turquía. Estos informes aún no han sido entregados a los familiares.

El pasado lunes, el juzgado notificó a la asociación la posibilidad de recurrir las pruebas científicas realizadas, así como el derecho a solicitar "cualquier prueba complementaria". Disponen hasta mañana para plantear un recurso, en cuyo caso se paralizará la entrega de los restos mortales de los 21 militares. Eva Jiménez descartó la posibilidad de un recurso de su familia.

"En el informe de Turquía ponía que llevaba un anillo en el dedo anular de la mano derecha y un sello con sus iniciales en la izquierda; podría pedir que me los entregaran", manifestó Eva Jiménez, quien dijo que "lo que queremos es olvidarnos de este tema y fiarnos de las pruebas de la Audiencia Nacional". En el caso de que ningún familiar presente recurso, los restos mortales del militar llegarán a Moraleja a finales de esta semana. Se celebrará un funeral en el Cementerio de La Almudena de Madrid y una misa y el posterior entierro en Moraleja a partir de las 17.00 horas de un día aún sin determinar, que podría ser el viernes o el sábado.

El entierro de Vegas se celebró el 29 de mayo de 2003 aunque en su lugar se dio sepultura a Joaquín Enrique Alvarez Vega, brigada del Ejército del Aire de Zaragoza. El cabo Vegas estaba enterrado en Javalí Viejo (Murcia), donde fueron exhumados sus restos el 25 de noviembre.