El alcalde de Casar de Palomero, Eduardo Béjar, denunció ayer públicamente la agresión sufrida por el concejal de Extremadura Unida Julián Delgado Domínguez, el pasado viernes en la pedanía de Azabal, a manos de "dos personas que no están de acuerdo con el Plan General de Ordenación Urbana".

Béjar, quien mostró el apoyo y solidaridad del gobierno local con el edil, explicó que los hechos sucedieron después de "la manifestación ilegal convocada por la plataforma Aunext" (Asociación Abusos Urbanísticos No en Extremadura) y cuando Delgado accedió a reunirse en la Casa de Cultura de Azabal con un grupo de vecinos que rechazan el plan urbanístico. El alcalde de Casar de Palomero rechazó "rotundamente todo acto de violencia" y afirmó que nada justifica la agresión a un concejal "por votar a favor del PGOU".

Asimismo, Béjar insistió en que el plan urbanístico se encuentra en periodo de alegaciones y, como ya afirmó en declaraciones a este diario, "puede ser modificado".

Por su parte, la presidenta de Aunext, Julia Mohedano, preguntada por la agresión al edil de Casar de Palomero, señaló que, aunque no la había visto directamente, sí le habían comentado, entre ellos el propio edil, que le habían propinado "un empujón".

En este sentido, quiso aclarar que la asociación se desmarca de este comportamiento y que el colectivo condena "cualquier tipo de violencia". Según la versión de Julia Mohedano, fue una persona "con problemas médicos" la que agredió a Julio Delgado. No obstante, sí reconoció que los ánimos ese día estaban muy crispados entre los vecinos, "agotados emocionalmente", dijo.

El plan de urbanismo de Casar de Palomero ha generado un enfrentamiento abierto entre los dueños de las fincas que se recalificarán y el alcalde. Unos y otros se acusan de buscar el interés particular y no el general del municipio.