La Guardia Civil ha detenido, dentro de la llamada Operación Gabarra, a seis personas pertenecientes a una banda que se dedicaban al hurto, transporte y venta de material robado.

Según ha informado la subdelegación del Gobierno en Cáceres, la investigación comenzó el pasado mes de octubre, cuando se denunció el hurto del remolque de un camión, cargado con electrodomésticos por valor de 60.000 euros, en un área de servicio situada en el término municipal de Deleitosa.

El destino era un centro comercial de Sevilla, por lo que la Guardia Civil de esta Comandancia, perteneciente a la Unidad Orgánica de Policía Judicial, inició las oportunas investigaciones, dentro de la que denomina operación Gabarras.

Tras una primera investigación, la Guardia Civil obtuvo indicios de que el conductor del camión-remolque y denunciante podía estar implicado, ya que el camión-remolque lo solía estacionar en la citada área de servicio, dentro del ángulo de visión de las cámaras de seguridad, cosa que la noche del hurto no hizo.

La Guardia Civil consiguió detener al conductor del camión, como supuesto autor de un delito de hurto y otro de denuncia falsa, así como a su esposa como supuesta encubridora del delito, al conocer todos los hechos e intentar facilitar una coartada a su marido.

Igualmente, fue recuperado por la Guardia Civil, el remolque hurtado sin la mercancía en su interior, en la localidad toledana de Santa Olalla.

Por otra parte, la Guardia Civil logró detener a otra persona en Talavera de la Reina (Toledo), como supuesto autor de un delito de hurto y robo, al haber forzado el remolque para su apertura, así como a un matrimonio en la población de Casar de Talavera (Toledo), como supuestos autores de un delito de receptación, al comprar la mercancía robada para su posterior venta a bajo coste.

Por último, el día 30 de marzo de 2010 fue detenido el conductor de una cabeza tractora que circulaba por la provincia, como presunto autor de un delito de hurto, al haber utilizado dicha cabeza para el traslado del remolque.

La banda estaba perfectamente estructurada, ya que entre los detenidos, cada uno tenía encomendadas diferentes tareas, como era el hurto de la mercancía, el transporte y finalmente la venta ilegal.

Los detenidos, fueron puestos a disposición del titular del Juzgado de Instrucción Número 1 de Navalmoral de la Mata, quedando en libertad con cargos.