El suministro de agua potable a varias poblaciones del entorno del río Tamuja está garantizado, a pesar del período de sequía, gracias a la construcción de una conducción de agua desde el Canal de Orellana, en las inmediaciones de Almoharín, llevada a cabo por la Confederación Hidrográfica del Guadiana. Resolver el grave problema planteado en las poblaciones suministradas desde la presa de Navarredondo sobre el río Tamuja y agrupadas en la Mancomunidad de aguas del Tamuja, ha sido el objetivo de la obra de emergencia que a partir de hoy permite que llegue agua a esos municipios, ha informado la Subdelegación del Gobierno de Cáceres. Las poblaciones que componen esta mancomunidad y que se verán beneficiadas son Plasenzuela, Botija, Torre de Santa María, Robledillo de Trujillo, Santa Ana, Benquerencia, Salvatierra de Santiago, Ruanes y Zarza de Montánchez, con una población aproximada de 3.300 habitantes. Las obras comenzaron en mayo de 2009 y han consistido en la construcción de una conducción de fundición dúctil con un bombeo desde el Canal de Orellana, en las inmediaciones de Almoharín, hasta un depósito de 1.200 m3 que sirve de rotura de carga en el alto del Cerro Capadero. Desde allí, otra conducción llevará el agua hasta la Estación de Tratamiento de Agua Potable situada en la presa sobre el río Tamuja. Las obras se encuentran totalmente operativas a falta de algunos remates en la obra civil, en automatismos de la elevación, telemando y algunas correcciones medioambientales. Esta actuación, ejecutada como emergencia por la CHG, ha contado con una inversión de 2.950.000 euros.