El municipio cacereño de Garrovillas de Alconétar abrirá el próximo lunes la primera Residencia de Mayores que irá destinada exclusivamente para personas dependientes.

El alcalde, Cándido Javier Gil, expresó ayer su satisfacción por la próxima puesta en marcha de unas instalaciones cuya construcción han requerido de cinco años, como consecuencia de los distintos contratiempos que han ido surgiendo y que impedían su apertura. Sin embargo, las gestiones realizadas desde el ayuntamiento en colaboración con el Servicio Extremeño de Promoción de la Autonomía y Atención a la Dependencia (Sepad) "han sido determinantes para salvar los numerosos y graves obstáculos que amenazaban la viabilidad del centro", señaló el alcalde.

De hecho, desde la Administración local se han agilizado diferentes trámites que afectaban a la instalación eléctrica, al sistema de evacuación y a la extinción de incendios.

Este centro residencial, según el alcalde uno de los más grandes de la región, se pondrá en marcha en un principio con 54 plazas que estarán disponibles para su ocupación, aunque está previsto que cuando se completen las instalaciones se llegará a ofertar un total de 190 plazas para usuarios del municipio y de fuera.

Además de ser un servicio que mejorará la calidad de vida de las personas dependientes, será un importante reactivo para el empleo "ya que creará 60 puestos de trabajo cuando esté a pleno rendimiento", señaló Gil. Finalmente, el alcalde detalló que el ayuntamiento y el Sepad han firmado un convenio bianual con carácter prorrogable para el mantenimiento del centro por un importe de 647.000 euros.