Emilio González no tiene dudas. "Es un acto xenófobo, racista y vandálico", afirmó ayer el autor de la patera homenaje a los emigrantes que en la madrugada del domingo quedaba totalmente destrozada después de que tres individuos le prendieran fuego y se dieran a la fuga en un coche de color oscuro.

Para el artista cacereño, que conoció los hechos a través de una llamada del alcalde de Aldeacentenera, lo ocurrido "es toda una provocación y un atentado contra el arte y la cultura". González consiguió la barcaza hace dos años en Algeciras, se la proporcionó Cruz Roja y en ella habían viajado unos 70 inmigrantes llegados desde las costas africanas. La patera tenía matrícula de Marruecos y los travesaños que sirven de asiento estaban rotos para que entrasen más viajeros en la barca, de más de seis metros de largo y unos dos metros y medio de ancho. Emilio González restauró la patera y la cubrió de ropas similares a las que visten los inmigrantes africanos, incluso consiguió varias zapatillas que todavía estaban en el interior de la barca.

La polémica siempre rodeó a la patera. El Ayuntamiento de Cáceres rechazó colocarla en la plaza de Las Veletas y en Talayuela, que ostenta una Medalla de Extremadura por ser un ejemplo de integración de la población inmigrante, el PSOE guardó la patera en un almacén antes de las elecciones y el PP, que resultó ganador de los comicios, rechazó exponerla en el parque natural. Mientras, el alcalde de Aldeacentenera, Juan Francisco Monterroso, anunció ayer que el monumento a la emigración sigue adelante y junto a la barcaza quemada también se instalarán otros elementos alusivos a la inmigración, como pudiera ser el caso de varias maletas. En Aldeacentenera hay otras obras de arte instaladas al aire libre, como en las piscinas, "y jamás han sido objeto de actos vandálicos". "Los vecinos, que estaban muy ilusionados, están indignados", concluyó Monterroso.