Un grupo de vecinos que residen en el poblado del pantano de Gabriel y Galán, en el término de Guijo de Granadilla, ha expresado su queja por las molestias, que según ellos, ocasionan las más de 400 personas que desde el pasado viernes acampan en la zona denominada Membrillares, junto al citado pantano. Angélica García, una de las vecinas afectadas, aseguró que desde el día 13, "no ha cesado la música y con un volumen excesivo", afirmó. A este ruido, según esta vecina, hay que sumar las molestias ocasionadas por la gran cantidad de caravanas, coches, puestos de comida y el gran número de perros que hay. "Hemos acudido a la Guardia Civil para denunciarlo, pero no hemos recibido ninguna información sobre la actividad, ni del periodo de permanencia", añadió. Los afectados aseguraron además que se han puesto en contacto con la Subdelegación del Gobierno en Cáceres, pero, "nos derivaron al Ayuntamiento de Guijo de Granadilla", dijeron.

SIN COMPETENCIAS Por su parte, el alcalde, Teodoro Jiménez, aseguró ayer ser conocedor de la problemática, pero aclaró que la única decisión de permitir o no la zona de acampada es de la Confederación Hidrográfica del Tajo con quien ya ha mantenido las primeras conversaciones con el fin de dar una solución lo más pronto posible. El alcalde explicó que entre las personas que están acampadas hay ciudadanos de Portugal, Francia, Checoslovaquia e Italia. "Me han dicho que van a Portugal a un festival de música tecno y que tienen este sitio como lugar de concentración y de reunión", señaló. Teodoro Jiménez aseguró además que en cuanto a la limpieza "no hay problemas", pero reconoció que la música que ponen se oye a ocho kilómetros de distancia, teniendo en cuenta que la zona de acampada está solo a unos 400 metros del poblado.