Una treintena de alumnos del IES Mario Roso de Luna de Logrosán acaban de regresar de vivir de una las experiencias que marcarán su juventud. A lo largo de una semana han recorrido Budapest, Viena y Praga para conocer y apreciar otras formas de vivir, hablar y pensar.

Como señala uno de los profesores que les ha acompañado, Cándido Almodóvar, «se trata de que disfruten y valoren la experiencia de viajar en grupo al extranjero». Para estos jóvenes, que cursan 1º de Bachillerato y que proceden de Logrosán, Cañamero, Guadalupe, Alía, Berzocana, Retamosa, Roturas y Navezuelas, han tenido que poner en práctica su dominio del inglés «algo que nos ha servido para darnos cuenta de que sabemos más de lo que creemos, porque nos entendían bastante bien», aseguran algunos de ellos.

Entre los lugares que más han llamado su atención en cada ciudad está el Parlamento y la Catedral de Itsvà, el castillo de Buda y la Ciudadella de Budapest. En la capital de Austria, Viena, han realizado un recorrido en el que han descubierto el edificio de la ópera, el palacio imperial de Hofburg o la catedral de San Esteban. Ya en Praga, donde han pasado los tres últimos días, han quedado «sorprendidos» por la visita al campo de concentración de Terezín, una fortaleza del siglo XVIII, con un pasado terrible, y que fue uno de los centros clave del Holocausto. Su misión ahora es la de recordar a las víctimas de la persecución política y racial durante la Segunda Guerra Mundial, como narran el resto de profesores acompañantes, Jesús Rentero y Ana Gutiérrez. El viaje se ha completado con un tour a pie por la ciudad y una visita al barrio del castillo, cuya fortaleza está considerada la más grande del mundo.