Cada vez suenan menos, pero con la llegada del mes de diciembre es habitual que las calles de Navalmoral se llenen también de los sones de las típicas rondas. Los moralos recorren las calles y los bares para cantar, al son de zambombas, almireles, botellas y panderetas, canciones típicas de la localidad que no tienen porqué tener ningún motivo navideño.

Por ello, varios miembros de los grupos de rondeños que hay en la localidad han hecho un llamamiento a todos los vecinos para que acudan el día 24 a la plaza del Jardincillo para hacer una gran ronda entre todos los asistentes. La hora de la cita es las 12 del mediodía, según ha explicado una de las promotoras.

Esta iniciativa ya se hizo el año pasado de una manera más organizada y entonces se logró que alrededor de unas 300 personas pudieran participar en una fiesta de homenaje al folklore popular. Según recuerda una vecina, a la cita acudió hasta gente mayor que ya no suele salir mucho de casa pero que durante la juventud sí rondaba en Navidad. Además, en varias ocasiones el ayuntamiento moralo ha intentado impulsar esta tradición con exposiciones, concursos, etc.