Los vecinos de la comarca vuelven, un año más, a sufrir numerosos cortes en el suministro de la energía eléctrica en sus municipios debido a las precarias instalaciones de distribución que tiene la compañía.

Los alcaldes de Casar de Palomero y Ladrillar, Eduardo Béjar y Miguel Domínguez, respectivamente, dicen: "con lo buenos clientes que somos, lo mínimo que tenían que hacer es modificar los transformadores y modernizar las líneas, de lo contrario no descartamos, en un futuro, cambiar de compañía. También instaremos a la Junta de Extremadura a que nos ayude a corregir la situación y a tomar medidas contra Iberdrola".

Desde el punto de vista profesional, Eva Hernández, directora de la hospedería Hurdes Reales, hotel de cuatro estrellas, explica que, "nosotros tenemos que tener conectado constantemente un grupo electrógeno para salir del paso. De lo contrario muchas noches no podemos trabajar".

El problemas, además, no sólo afecta a las grandes empresas, sino que también pequeños industriales tienen numerosas averías con sus máquinas debido a los insistente corte de luz.

El presidente de una de las asociaciones más importantes de hostelero, Jesús Domínguez, también ha mostrado su malestar y manifiesta: "nos vemos indefensos con Iberdrola, para ello solicitamos la ayuda de la Administración. Los cortes está perjudicando no sólo a las máquinas, sino al servicio y trato con los clientes".