Un informe arqueológico ha confirmado la existencia de grietas en el puente medieval de Moraleja, una construcción de los siglos XVI y XVII que fue rehabilitada en la anterior legislatura bajo el mandato de los socialistas. La alcaldesa, Concepción González, informó que los estudios técnicos realizados avalan la tesis defendida por los populares cuando se encontraban en la oposición de que las obras ejecutadas por el PSOE fueron "una chapuza".

"Es otro informe que revela que se hizo terrorismo arqueológico y contra el patrimonio", dijo la edil popular, quien lamentó que "los técnicos nos hayan dado la razón".

González dijo que un estudio técnico del ayuntamiento puso de relieve la existencia de grietas en los tajamares que pueden achacarse a la utilización de maquinaria pesada durante las obras de rehabilitación. Por este motivo, el equipo de gobierno ha encargado la redacción de un informe arqueológico más detallado que confirme esta teoría.

Con el propósito de informar a los ciudadanos del estado en el que se encuentra el puente, los populares realizarán una exposición fotográfica que servirá para denunciar que "las obras fueron una auténtica barbarie". Los informes ya realizados revelan que la cimentación del puente ha cedido debido a que la estructura sufrió un peso considerable con la nueva losa y con la utilización de máquinas que nunca deberían haberse utilizado.

El equipo de gobierno ha solicitado "una reunión urgente" al Ministerio de Vivienda para buscar soluciones, ya que es su intención "trabajar para que el puente no se venga abajo".

La alcaldesa ha confirmado que el ayuntamiento no tiene previsto recepcionar la obra en las condiciones en que se encuentra y sostiene que demostraría "una gran irresponsabilidad" hacerlo.