Una antena de telefonía móvil ha sembrado la discordia entre un vecino de Campo Lugar y el ayuntamiento de esta localidad cacereña de 700 habitantes y, en concreto, con su alcalde, Emiliano Regodón.
José Antonio Fernández firmó un precontrato para la instalación de una torre de la empresa Vodafone en una finca propiedad de su madre. Según relata, cuando se dirigió al ayuntamiento para solicitar el correspondiente permiso para que se procediera a la colocación de la antena, éste le fue denegado, pues un grupo de vecinos había presentado firmas --más de 80 según fuentes municipales-- en el consistorio para oponerse a tal actuación.
Fernández afirma que el pleno municipal "accede a no dar permiso por la presión de dichas firmas" --aunque asegura que la Junta no ha encontrado ningún impedimento para su colocación-- y añade que esto sucede porque "algunos concejales de mi pueblo tienen negocios y ante alguna presión de ese tipo no tienen reparo en apoyar cualquier tipo de firma que se presente".
Pero, cuando este vecino se ha sentido realmente "agraviado" es cuando tuvo conocimiento de que "el señor alcalde da permiso para que se instale otra torre de telecomunicaciones en esa misma fecha --junio del 2004-- en la finca propiedad de su padre".
El alcalde aclaró que esta gestión la ha realizado su padre "directamente con Amena" y que él nada ha tenido que ver. La autorización, según explicó, se ha concedido porque ningún vecino ha presentado quejas sobre la instalación de esta torre, al contrario que en el caso de Fernández.
Regodón insistió en que en ningún momento ha mirado "el interés particular" y que, inicialmente, el ayuntamiento estaba dispuesto a que la torre de Vodafone se instalase en la finca familiar de Fernández --donde, dijo, ya hay una de Movistar--, "porque creíamos que era beneficioso, pero los vecinos no querían más antenas".
La cuestión es que Férnandez se siente agraviado y defiende que "todos somos iguales ante la ley, según la Constitución" y Regodón ve que su responsabilidad municipal le obliga a atender las demandas de sus vecinos y velar por el "interés general".
