Minutos antes de las 06.00 de la tarde de ayer tuvo que ser evacuada en helicóptero desde el Collado de las Yeguas, una joven que participaba en la XXIX edición de la Ruta de Carlos V, que une Tornavacas y Jarandilla, organizada por el Club Placentino de Montaña, en colaboración con la Mancomunidad Integral de Municipios de la Vera, el ayuntamiento de Jarandilla, Adicover y el Grupo de Montaña de Tornavacas. Fuentes de la organización confirmaron que la joven evacuada tenía una rodilla lesionada, lo que le impedía caminar. Esto hizo que previamente fuera trasladada en camilla hasta la cima del Collado de las Yeguas. Con respecto al capítulo de lesiones la organización señaló además que "hay que añadir, ampollas en los pies y torceduras menores".

En cuanto a la participación hubo alrededor de quinientos quince caminantes inscritos, a los que hay que añadir un número indeterminado, compuesto por "los sin papeles", (no inscritos), que cada año se suman a la marcha. Todos ellos recorrieron ayer la Ruta de Carlos V.

La caminata se vió realzada por "el espléndido" día que amaneció, permitiendo a los montañeros, llegados de diferentes comunidades autónomas, disfrutar de los maravillosos paisajes que jalonan el trayecto que siguió el Emperador de la Casa de Austria, cuando se dirigía a su retiro definitivo en el Real Monasterio de Yuste, el día 12 de noviembre del año 1556.

Poco antes de las 08.00 de la mañana partía de Tornavacas la cabeza de la serpiente multicolor que formaban los varios cientos de caminantes que participaron en la ruta. Sin embargo el primero que pasó el último control, ubicado en el paraje de San Francisco, en las inmediaciones del casco urbano de Jarandilla de la Vera, lo hizo a las 12.15 del mediodía.

Otros en cambio optaron por hacer el recorrido de forma "tranquila", parándose, incluso a buscar setas, aprovechando que la temporada de este tipo de hongos --abundante en toda la zona-- está en pleno auge en estas fechas.

Por último por lo que respecta al estado del firme del camino que configura la ruta carolina, "se encuentra bastante bien, aunque puede resultar duro, ya que está empedrado en gran parte del trayecto", reconocieron tres jóvenes caminantes.