El Consejo de Gobierno autorizó ayer la contratación de las obras de construcción de un nuevo puente sobre el río Tajo en la localidad cacereña de Alcántara, por un importe de 18.683.052 euros. La alcaldesa, Mónica Grados, se ha mostrado «muy ilusionada con la idea, ya que con este proyecto se va a dejar descansar a la otra pasarela». Igualmente ha lamentado que «todavía no se han ejecutado las rehabilitaciones oportunas en el viaducto romano. Se nos va a caer y el pavimento sigue sin estar reparado».

La finalidad de este contrato es la construcción de una variante en la carretera EX-117 que implica la construcción de un nuevo puente sobre el río Tajo dentro del término municipal, con el objetivo principal de mejorar la movilidad y seguridad vial en esta carretera, evitando que el tráfico de vehículos continúe circulando por encima de esta joya, declarada Monumento Histórico-Artístico.

Se pretende construir con este proyecto un viaducto paralelo al actual, que canalice el tráfico rodado y que, por tanto, evite los peligros que implica la circulación del transporte sobre el puente romano, que quedará destinado exclusivamente al tránsito peatonal.

La variante de trazado en la cual se proyecta el nuevo puente sobre el río Tajo comienza en el punto kilométrico 35 de la carretera autonómica EX-117, en la margen derecha del río Tajo, y tiene una longitud de 705 metros.

La nueva estructura sobre el río Tajo, con una longitud total de 409,50 metros, se resuelve en tres tramos claramente diferenciados, en consonancia con el estudio previo que realizó la Administración. De esta manera incluirá un primer tramo o puente principal, con una largo de 267 metros, el segundo tramo, será de 34,50 metros, y el último de 108 metros. El plazo de ejecución es de 30 meses.