La junta local de la Asociación Española contra el Cáncer, como el resto de colectivos de la ciudad, se ha visto obligada a suspender la mayor parte de los actos y actividades previstas para este excepcional año. De hecho, lo último a lo que la agrupación ha tenido que renunciar ha sido la cuestación que cada año realizan con motivo del Día Mundial contra el Cáncer de Mama, celebrado ayer.

A pesar de esto, el colectivo trujillano no ha parado en todo el año y aunque hace escasamente un mes que suspendieron la tradicional ‘marcha rosa’, han adaptado su actividad a los tiempos del coronavirus y desde el inicio de la pandemia, sus componentes han estado confeccionando mascarillas y elementos sanitarios para empresas y residencias.

Una vez pasados los peores momentos, han vuelto a centrarse en sus quehaceres habituales y ya piensan en la campaña navideña, en la que montan un nacimiento y exponen y venden las manualidades que han ido realizando a lo largo del año.

Ana Bravo, miembro de esta junta local, señala que «a pesar de que aún no sabemos si contaremos con el local de la plaza del año pasado, estamos inmersas en la fabricación de los adornos, como cada año y si todo va bien, esperamos montar el belén».

En cualquier caso, la función principal de este colectivo es servir de apoyo y asesoramiento a las personas de la ciudad que lo necesiten, por lo que recuerdan que «las puertas de la asociación están abiertas para facilitar el proceso a cualquiera que lo pida», dicen.