Ante las versiones opuestas que de un incidente ocurrido el pasado 6 de febrero en el Ayuntamiento de Sierra de Fuentes ofrecieron ayer en el juicio celebrado en la Audiencia Provincial su alcalde, Julián Polo, y el procesado, el edil del PP Adrián Guerra Polo, al que se acusa por una presunta agresión al alcalde, habrá de ser la justicia la que determine si hubo tal agresión o si solo discutieron y le dio un empujón, como aseguró el acusado.

El incidente se produjo sobre las 10.45 horas, cuando el alcalde le pidió al concejal que no utilizara los teléfonos del ayuntamiento y se marchara de las dependencias en que se encuentran los trabajadores del consistorio, "porque existe una resolución de la alcaldía, que además es de anteriores equipos de gobiernos, en los que Adrián Polo era teniente de alcalde, que prohibe a los ediles de la oposición utilizarlos", señaló el alcalde.

Este aseguró que se lo pidió con educación, pero que el concejal respondió diciendo: "Hago lo que quiero, porque además tú no eres ni alcalde ni nada" y al mismo tiempo, añadió, "me golpeó hasta que me dio en la cara".

Por su parte, el acusado manifestó que el alcalde salió del despacho "pidiéndome a voces que saliera y dándome empujones, a lo que yo únicamente respondí diciéndole que me dejara en paz, que no me humillara delante de la gente, y como no paraba le empujé y me marché".

PENAS Por estos hechos, que provocaron en el alcalde, según los partes médicos, daños en el ojo y el oído izquierdo, además de una crisis de ansiedad por la que estuvo de baja tres meses, el Ministerio Fiscal le acusa de un delito de lesiones por el que pidió para Adrián Guerra un año de prisión y una indemnización de 600 euros a su víctima.

El abogado de Julián Polo le considera autor de un delito de lesiones, por el que pide 1 año de prisión y 1.000 euros de indemnización; y de un delito de atentado a la autoridad, por el que pide 6 años de prisión. Mientras, el abogado de Adrián Guerra, por su parte, estimó solo imputable una falta contra las personas y otra de desobediencia leve a la autoridad, y pidió dos multas de 180 y 60 euros.