La lluvia y el frío fueron los protagonistas de las Fiestas de los Negritos de San Blas que celebró ayer el municipio cacereño de Montehermoso. Las inclemencias del tiempo deslucieron en cierta medida la fiesta, pero no fueron ningún impedimento para que miles de montehermoseños salieran a la calle para participar de cerca en la festividad de San Blas para la cual el ayuntamiento había programado varios actos que se desarrollaron desde el sábado hasta ayer domingo. Así también, fueron muchos los ciudadanos de la comarca del Valle del Alagón y de otros puntos de la región y del resto de España que se trasladaron hasta Montehermoso para disfrutar del espectáculo en vivo.

Ayer, que se celebró el día grande, las 17 danzas interpretadas por los Negritos volvieron a ser el gran atractivo de un festejo que fue declarado de Interés Turístico Regional a finales del año 2005. Estos bailes, que son la zapateta, la golondrina, el cardo, la zarza, el jaramago, el ama del cura, los oficios, la danza del pie, la culebra, la emperadora, la gascona, los vuelos, el mambrú, la moza gallarda, la sorda, el cordón y la zorrita, guardan tras de sí 600 años de historia.

El alcalde, Carlos Labrador, lamentó la lluvia y el frío. "Es una lástima porque además la fiesta había coincidido en domingo y con el buen tiempo seguramente que mucha más gente se hubiera atrevido a venir hasta aquí", señaló mientras acompañaba al santo en procesión desde la ermita de San Blas hasta la plaza de España. Labrador destacó que cada año acuden turistas más interesados en el aspecto etnográfico de la fiesta.

CORDONES DE COLORES Una de las tradiciones que forman parte de esta fiesta son los típicos cordones de San Blas, que según una leyenda si se cuelgan en el cuello protegen la garganta de cualquier dolencia. Este año las personas que se han encargado de ayudar a la mayordoma en la preparación de los actos han elaborado 9.000 cordones de colores para vender, unos 3.000 más que los que se ofrecieron el año pasado, dada la gran demanda del público. Un total de 20 personas se encargaron ayer de venderlos a 50 céntimos cada uno.

María José Alcón ha sido este año la persona encargada de ejercer de mayordoma de las fiestas de San Blas. "Hace cuatro años hice la promesa cuando mi hija enfermó y este año la he cumplido", explicó ayer. Además, unos 200 cohetes se lanzaron en honor al santo cuya imagen tuvo que ser cubierta con un plástico para protegerla de la lluvia durante la procesión.

Silvia González, concejala de Cultura, manifestó que la fiesta goza de una gran promoción en ferias especializadas. "Gracias al apoyo de la diputación de Cáceres promocionamos Los Negritos en ferias, y promocionar el festejo es vender la comarca y el rico patrimonio que tenemos", afirmó. Además, se organizaron juegos para los niños, una paella popular, actuaciones musicales y una degustación de dulces.