El Ayuntamiento de Malpartida de Cáceres ha decidido acabar con los graffiti incontrolados. El alcalde, Antonio Jiménez, mostró ayer su preocupación por el incremento de jóvenes de entre 12 y 14 años que se han aficionado a esta práctica en los últimos meses y que ha dañado la imagen y estética del municipio. Una de las acciones que más ha molestado al consistorio ha sido las pinturas que han plasmado en un muro de 50 metros de largo que se encuentra en una plaza pública recién inaugurada.

A esto hay que añadir, las pintadas en las señales de tráfico del municipio, así como en las paredes de calles, viviendas y en los contenedores, que se han convertido en el punto de mira de los graffiteros . "Causan mucho daño estético al municipio y además daños económicos valorados en miles de euros", afirmó el alcalde.

SOLUCIONES Desde el Ayuntamiento de Malpartida de Cáceres se ha optado por aplicar medidas de "reeducación", en sustitución de las represivas. El primer paso que ha dado el alcalde en este sentido ha sido mantener contactos con los jóvenes con el fin de llegar a un acuerdo para evitar que sigan dañando la localidad. "Nuestro objetivo es canalizar de una forma adecuada estas manifestaciones artísticas de la juventud", dijo el alcalde de Malpartida de Cáceres.

Otro de los pasos importantes que han dado tanto ayuntamiento como los jóvenes es la creación de una asociación de graffiteros , que, aunque todavía no ha llegado a constituirse, ya tiene nombre: Street Style.

Antonio Jiménez explicó ayer que el ayuntamiento colaborará con estos jóvenes para que participen en actos puntuales que se celebren a lo largo del año, pero en lugares específicos. Además el consistorio malpartideño ha cedido a los jóvenes un muro en las traseras del campo de fútbol para que puedan hacer desarrollar esta práctica.