Garrovillas de Alconétar fue ayer víctima del primer accidente laboral del 2011. Un trabajador falleció en una finca de la localidad al caerle sobre la cabeza un paquete de ferralla mientras descargaba la mercancía con una pala cargadora. Aún se investigan las causas, aunque según los primeros indicios parece que el material se soltó de la máquina y cayó sobre el camión en el que descargaba golpeando brutalmente al empleado, que falleció en el acto.

El accidente ocurrió pasadas las 10.00 horas en una nave que la empresa Isolux Corsán Corviam tiene como almacén del material que utiliza para llevar a cabo la obra de una nueva depuradora de aguas residuales, financiada por la Confederación Hidrográfica del Tajo.

Sin embargo el fallecido no pertenecía a Isolux, sino a una subcontrata de esta, procedente de Salamanca. De hecho el muerto, que responde a las iniciales de J. A. V., tenía 58 años y era natural de la localidad salmantina de Arapiles. Desde la Isolux Corviam no quisieron hacer ninguna declaración. "Estamos desorientados y muy afectados. Preferiría no decir nada", dijo el encargado de la empresa en la obra visiblemente conmocionado, igual que el resto de sus compañeros, que intentaban encajar, de alguna manera, lo sucedido.

"Aún hay que analizarlo. Nosotros hemos mandado allí al técnico de seguridad laboral para que elabore un informe con lo ocurrido. Esperaremos a que se haga la investigación oportuna, pero si se confirma que ha habido una negligencia en cuanto a seguridad vamos a pedir que la ley recaiga sobre la empresa y los culpables", advirtió el secretario general de la Federación del Metal, Construcción y Afines de UGT (MCA-UGT) en Extremadura, Miguel Angel Rubio, tras lamentar el fallecimiento. Y añadió que "al final el más débil es que paga", haciendo referencia a la precariedad laboral a la que se enfrenta en estos momentos el sector y los trabajadores de la construcción.

Por su parte la vicepresidenta primera y portavoz de la Junta de Extremadura, Dolores Pallero, mostró sus condolencias a la familia del fallecido durante una rueda de prensa celebrada en Mérida para informar sobre los acuerdos del consejo del gobierno autonómico.

Hasta el lugar de los hechos se trasladó una pareja de la Guardia Civil, recursos sanitarios del consultorio de Garrovillas del Alconétar y un técnico del Centro Extremeño de Seguridad y Salud Laboral, según informó Efe.

21 MUERTES EN 2010 Se trata del primer accidente de trabajo mortal del 2011. Pero ocurre después de un año negro en este sentido, en 2010 se registraron 21 muertes, una cifra muy elevada si se tiene en cuenta que en todo 2009 fallecieron cinco personas mientras realizaban su trabajo. "Empezamos mal el año. El año pasado fue catastrófico. Ha aumentado con creces el número de accidentes mortales. Esto nos lleva a pensar que los empresarios del sector se están relajando y no prestan atención a la seguridad y salud laboral", dijo el secretario general de la Federación del MCA-UGT, que recordó que se ha reducido el índice de siniestralidad laboral en relación con la población activa porque ha aumentado la tasa de desempleo en el sector.