Multitudinario adiós al niño que falleció ahogado este fin de semana en una piscina de una finca cercana a Trujillo. La localidad se volcó para despedir al pequeño Pablo y arropar a la familia en el funeral que se celebró en la localidad trujillana pasadas las 16.00 horas.

Los hechos ocurrieron el domingo a media mañana en la finca propiedad de su familia en la pedanía de Belén cuando el menor se precipitó de forma accidental a la piscina. Servicios sanitarios y un helicóptero con base en Malpartida intentaron reanimar al pequeño pero no pudieron salvarle la vida. La Guardia Civil investiga los hechos. La delegada del Gobierno en Extremadura, Yolanda García Seco, lamentó ayer lo ocurrido y en declaraciones a los medios, no quiso dar detalles de la investigación pero anotó que todo apunta a «que ha sido un accidente».