La sala dedicada a la pieza del mes el Museo del Queso de Casar de Cáceres estrena objeto: el cincho. Se trata de un elemento imprescindible en la elaboración del queso de oveja. Esta pieza, que estará expuesta todo el mes de noviembre, es una tira de 276 centímetros de largo y de 9,5 centímetros de ancho y consta de una faja de esparto tejido reforzada en los extremos por hilos de esparto.

Cada vez que el pastor terminaba de hacer el queso, introducía el cincho en agua para que los restos de cuajada que se hubieran quedado incrustados, se desprendieran. Mas tarde lo extendía al sol para que se secara y evitar que la humedad estropeara el esparto. Una vez acabada la temporada de elaboración del queso, los cinchos se escaldaban en agua hirviendo y se guardaban.