La fortuna quiso que en la madrugada de ayer nadie transitara por la calle Canalejas, situada en el centro de la población, evitando lo que podría haber sido una desgracia. Y es que hacia las 2:30 de la madrugada se derrumbó parcialmente una vieja casa situada en la citada vía cayendo gran parte de su fachada y parte del tejado sobre la vía pública.

Una vez alertada la Policía Local a través de los vecinos, se instaló una valla protectora para evitar que nadie pasara cerca de los cascotes hasta que los dueños de la propiedad procedan a su demolición total. En la mañana de ayer varios operarios comenzaron a retirar los escombros vertidos sobre la calle.

Vecinos del barrio señalaron que si el suceso hubiese ocurrido horas mas tarde habría tenido consecuencias fatales, ya que junto a la citada casa se encuentran varios establecimientos comerciales entre ellos una churrería muy frecuentada en horario de mañana para desayunar.

EL OTRO CASO

Además, otra casa situada en Gabriel y Galán (cerca de la Cruz de Los Caídos) también sufrió las consecuencias del paso del tiempo y del mismo modo que la anterior parte de la fachada se desprendió sobre la calle por lo que hubo que acordonar la zona.