Piornal, la localidad más alta del Valle del Jerte, amaneció ayer con una copiosa nevada en sus calles, casas y las laderas de las montañas, como ya ocurrió hace unas dos semanas. Al igual que Piornal, en La Garganta, en el Valle del Ambroz, también nevó aunque no terminó de cuajar.

Una cosa pocas veces vista, en el tiempo que estamos: nieve en primavera. Aunque tratándose de Piornal, todo es posible. El frío y las precipitaciones en forma de nieve tiñeron de blanco las calles piornalegas para disfrute, desde las ventanas, de los vecinos y vecinas. Algo más copiosa que la última que cayó a mediados de marzo.

Durante el día se fue diluyendo con el agua caída, pero a última hora de la tarde aún quedaban rincones con nieve en la localidad.

más nieve / En otros lugares de la provincia de Cáceres también cayó nieve. Como es el caso de La Garganta, el municipio más alto del Valle del Ambroz y en el que el pasado 15 de marzo también cayó una copiosa nevada, de unos 40 centímetros.

«La de hoy (por ayer) no ha sido tan grande. Ha nevado, pero menos que la última vez y los operarios encargados de echar sal a las carreteras cuando nieva actuaron de forma rápida para que no hubiera ningún problema a la hora de salir o entrar los vehículos», explicó el alcalde de La Garganta, Juan González.

La nieve siempre será bien recibida, aunque sean con la primavera ya en marcha, porque supondrán que en verano los ríos y arroyos no tengan problema de caudal de agua.

Ahora solo falta esperar como afectará este frío, esta lluvia y estas nevadas a la producción de frutas, principalmente a la cereza en el Valle del Jerte, donde la mayoría de los cerezos ya se encuentran en flor.

Más de un millón y medio de cerezos que este año no recibirán las visitas de miles de turistas que cada año se acercan para contemplar este espectáculo de la naturaleza que tiñe de blanco todas las laderas de las montañas del Valle del Jerte, para asombro de los visitantes.