La continuidad del cultivo del tabaco figura "entre las dos o tres preocupaciones más importantes que tenemos en el Gobierno extremeño de cara al futuro", según desveló ayer el consejero de Agricultura y Desarrollo Rural, Juan María Vázquez.
El consejero hizo estas declaraciones momentos antes de iniciar el recorrido que realizó por la planta equipada con veinticuatro secaderos de tabaco rubio, cuyas calderas se alimentan mediante combustión de biomasa, que la Cooperativa Coolosar, de Losar, de la Vera, ha construido en la finca El Robledo.
En cuanto a la estrategia a seguir ante el problema que se cierne sobre el cultivo del tabaco, el consejero dijo que "vamos a trabajar a tope con todo el sector, y con algún otro país, con el que estamos buscando alianzas".
Por lo que respecta a la planta de secado Vázquez dijo "que es de las más avanzadas de Extremadura y de España, con unas mejoras medioambientales impresionantes", al alimentarse de la combustión de huesos de aceitunas y cáscaras de almendras.
Por su parte el gerente de Coolosar, Cándido Barrera, indicó que "se trata de un proyecto de 150 secaderos de tabaco que serán construidos en otras dos fases más". El presupuesto de las 24 estufas ha ascendido a 700.000 euros, y el ahorro por kilo de tabaco secado se sitúa en torno a los 38 céntimos.
