Miembros de la protectora de animales Refugio Turgalium de Trujillo han llevado a cabo un encuentro con los niños que participan en el campamento de verano de Cruz Roja, para hablarles sobre el amor y el respeto a los animales. Según su responsable, Mario Gilabert, la idea es transmitirles que los perros como mascotas exigen responsabilidad. «Queremos que comprendan que no son un juguete, y que tienen sentimientos y necesidades», ha dicho. A la charla también ha asistido Ángel, uno de los 25 perros que hay actualmente en la protectora, y al que los niños han acariciado y dado de comer. Además, a los asistentes se les ha dado nociones de cómo acercarse a un perro «para que no tengan miedo de hacerlo».