Cerca de tres mil personas se manifestaron ayer en el Alto de Casares, en Las Hurdes, para solicitar a la Diputación de Salamanca el arreglo urgente de la carretera entre Nuñomoral y Ciudad Rodrigo, con acceso a la N-620, que próximamente se convertirá en autovía. Los manifestantes solicitan de este modo la reforma de un acceso que les conectará con una vía rápida en menos de quince minutos.

Al acto acudió el secretario provincial de los socialistas cacereños, Juan Ramón Ferreira. "Desde la Junta de Extremadura estamos trabajando en el mundo rural, modernizando infraestructuras y creando otras. Hoy instamos a Salamanca a reformar la vía y unirla con el nuevo trazado que estamos realizando en la comarca de Las Hurdes por la parte extremeña", subrayó.

LUCHAR DESDE LA UNION

Por su parte, Olegario Rodríguez, alcalde de la localidad de Casares, animó a luchar desde la unión. "Para nosotros es importantísima esta carretera, ya que gran parte de los hurdanos tenemos actividades económicas que incluyen el comercio con la provincia de Salamanca", señaló.