Escolares de la Sierra de San Pedro-Los Baldíos han participado en un intercambio junto a otros alumnos de la zona de Montánchez y Tamuja. El grupo ha tenido la oportunidad de descubrir los valores naturales, culturales y artísticos que alberga Montánchez, a través del proyecto de cooperación regional Guadiana: el Río que nos une , financiado por el programa de desarrollo comarcal Enfoque Leader. En concreto, participaron alumnos del colegio Nuestra Señora de Chandavila de La Codosera, así como de los pueblos de Membrío, Salorino y Herreruela.

Los escolares conocieron de primera mano un huerto urbano trabajado por personas con discapacidad y los productos recogidos son donados a la Casa de la Misericordia de Alcuéscar. Así también, participaron activamente en un taller de alimentación y hábitos saludables junto con monitores del programa de Ciudades Saludables y Sostenibles de la Mancomunidad Sierra de Montánchez, donde realizaron una pirámide alimenticia.

COMIDA Y RUTA Este intercambio, que ha pretendido principalmente sensibilizar, proteger y conservar el patrimonio natural, se ha complementado además con el recibimiento de los alumnos por parte del equipo técnico de Adismonta en el salón de actos de la sede del Ceder donde también se celebró una comida convivencia. Después, el grupo se desplazó hasta Zarza de Montánchez para participar en una ruta de senderismo hasta la encina de La Terrona, árbol singular con ochocientos años de vida. Además, esta encina está considerada la más grande de la Península Ibérica con una altura aproximada de diecisiete metros de alto y un diámetro de copa de veintseis metros. Durante esta actividad, la técnico de medio ambiente en Adismonta, Ana Belén Delgado, explicó las singularidades de la encina.