El PSOE provincial denunció ayer, a través de un comunicado, "graves irregularidades" en el traslado de restos humanos del cementerio de Sierra de Fuentes, que se clausuró en 1999, a una escombrera en las afueras del pueblo, una decisión de la que responsabilizan al gobierno municipal y, concretamente a su alcalde, Andrés Guerra.

El traslado se ha realizado, según los socialistas, "sin haber adoptado las mínimas exigencias legales y sanitarias". Añadieron que en este lugar se pueden ver "huesos humanos con restos de ropa y lápidas en la superficie con el consiguiente mal olor, originando un panorama dantesco y exponiéndolos a que algún animal se los lleve".

Además, criticaron "la falta de decencia" que han tenido los responsables municipales al tratar estos restos "como si fueran desperdicios", ya que, aunque nadie los haya reclamado, se deberían haber llevado a un lugar "más digno y de acuerdo a la normativa vigente". Este hecho, "preocupante" para los vecinos de Sierra de Fuentes, según el PSOE, se agrava porque la escombrera está "muy cerca" del río Guadarroyo, afluente del Guadiloba, que es el pantano de abastecimiento de agua de la localidad y de Cáceres.