Los padres y madres de los alumnos del centro de educación infantil Nuestra Señora de las Angustias, de Navalmoral de la Mata, están recogiendo firmas para pedir que la guardería pública --que está gestionada por la Junta de Extremadura-- vuelva a tener su horario habitual.

Desde el pasado 8 de enero, las clases para los niños finalizan a las 15.25, cuando antes el centro cerraba a las 16.45 horas. La razón que les han dado para esta recorte horario es que es necesario reducir gastos. "Si están recortando gastos, ¿por qué están ampliando el centro? No tiene sentido", razona un padre. Otra madre se ha puesto en contacto con la Junta de forma individual para recabar información y le han explicado lo mismo: que es mucho gasto, que no es rentable y que la medida se ha tomado para todos los centros infantiles que gestiona el Gobierno regional. "Antes las guarderías dependían de Educación y las pasaron a Igualdad y Empleo por temas de conciliación, ¿entonces como puedes conciliar con este horario?", se preguntan.

"Estos cambios han sido aprobados en base a un estudio de necesidades y para facilitar la conciliación de la vida laboral y familiar. El objetivo es ajustar el funcionamiento de los centros al horario de trabajo de tutores y padres. Para ello, se ampliará el horario de entrada en todos los centros a primera hora de la mañana, a las 7.30 horas. "Hasta ahora algunos centros abrían hasta las 16.30 horas, pero en la mayoría de los casos eran muy pocos los menores que permanecían en los centros después de las 15.15 horas", es la repuesta que, al respecto, ha dado la Consejería de Igualdad y Empleo de la Junta a este diario.

Los padres y madres de Navalmoral ya han enviado una carta a la Junta, acompañada de unas 200 firmas --la recogida continúa--. En la misiva sostienen que una de las razones por las que eligieron este centro es "por el horario que tenía" y dicen sentirse engañados. "¿Qué hacemos con nuestros hijos? Nos es imposible llegar a por ellos a esta hora", señalan argumentando los horarios de trabajo. Añaden que "no se ha tenido en cuenta el bienestar de los niños(...) ¿Cómo se pueden cambiar los horarios tan fácilmente dentro de un mismo curso?, ¿los padres no contamos para nada?", finalizan.