La retirada de un camión de 6.000 kilos de peso y 15 metros de largo, incluyendo la cabina del conductor, ocasionó ayer que durante más dos horas la Guardia Civil cortara la carretera Ex-109, justo en el kilómetro 13,600, en el término municipal de Portezuelo. El vehículo, conducido por J. M., de nacionalidad portuguesa, se dirigía a Montehermoso, donde debía descargar 24.000 kilos de abono para las aceitunas. Esta mercancía cayó en el margen derecho de la carretera y quedó esparcida entre algunos amasijos de hierros de la carrocería del camión.
La retirada del vehículo se efectuó ayer por la tarde, desde las 15.00 hasta las 17.30 horas, pero el accidente se registró el lunes sobre las 22.00 horas. El hecho de que el vehículo quedara volcado en el arcén izquierdo, fuera de la vía y sin suponer un obstáculo para la circulación, es uno de los motivos que llevó a la Guardia Civil a esperar a la jornada de ayer para retirar el vehículo aprovechando la claridad del día. Además, los numerosos trámites burocráticos que requiere el corte del tráfico de una vía fue otro motivo que retrasó su retirada, según aseguraron fuentes de la Guardia Civil.
SIN HERIDOS A pesar de las espectaculares consecuencias del accidente, el conductor del vehículo no sufrió daños personales graves, tan sólo pequeñas heridas y magulladuras que ayer mostraba en su rostro.
J. M., que ha circulado por esta carretera en varias ocasiones, se personó ayer por la tarde para ser testigo de la retirada del camión y explicó lo sucedido. "Se me cayó una caja de medicamentos en el pie, me agaché a cogerla y fue cuando me salí de la vía. Al intentar incorporarme ya no pude", afirmó.
El conductor expresó su malestar por la estrechez del arcén y aseguró que si la calzada hubiera sido más amplia el accidente podría haberse evitado.
Para el rescate del camión se recurrió a una grúa Grove GMK 30-35 que fue trasladada desde Plasencia. Primero enderezó la carrocería del trailer sobre la vía y después rescató la grúa del conductor, que tras el accidente se había desprendido y permanecía boca abajo en el interior de una finca privada.
