Agentes de Medio Ambiente retiraron este miércoles los cadáveres de dos cigüeñas muertas en Zarza de Granadilla, en la zona conocida como La Alhóndiga, después de que las aves llevasen 48 horas abandonadas.

Un vecino de la localidad encontró las cigüeñas el lunes día 6 y notificó su hallazgo a la Guardia Civil del municipio, que se puso en contacto con el teléfono de información sobre la gripe aviaria gestionado por la Junta. Fuentes de la benemérita confirmaron que la persona que atendió a este número afirmó que se enviaría "a un agente medioambiental para recoger muestras y examinar las cigüeñas".

Los vecinos de Zarza han expresado su malestar por el tratamiento que se ha dado al asunto y han mostrado su preocupación por la situación. "Las cigüeñas se las estaban comiendo los gatos; eso es vergonzoso", afirman.

Según los ciudadanos, las cigüeñas pueden haber muerto "electrocutadas", ya que estaban debajo de una torreta de alta tensión. No obstante, ante la alarma generada por la gripe aviaria, los vecinos añadieron que ante "la hipotética situación de que las aves tuvieran el virus, éste ya se podría haber transmitido a los gatos".