Practicar deporte de aventura está al alcance de cualquiera en el norte de Cáceres. Ya no es necesario hacer kilómetros para saber qué se siente sobre una tabla de windsur o como un auténtico buzo sumergido en aguas del embalse de Borbollón. La oferta permite al aventurero liberar tensiones con un trepidante descenso en kayak o recorrer los mejores senderos del norte cacereño a dos ruedas.

La solución se llama Extremavela, una empresa regional que apuesta por los deportes de aventura para afianzar el turismo en la zona del embalse de Borbollón, en el término municipal de Santibáñez El Alto. "Apostamos por el turismo de acción. por el deporte de aventura", explicó Ramón Torres, uno de los promotores de esta iniciativa, pionera en la comarca. "Este tipo de turismo todavía escasea en Extremadura, es una pena", añadió. La iniciativa incluye una de las actividades más novedosas del deporte de aventura en costa interior como es la práctica del Windsurf. En esta caso y por un precio asequible a todos los bolsillos, Extremavela pone a disposición de los turistas varios monitores expertos de la materia que enseñan las técnicas básicas en los cursos de iniciación de este deporte acuático. Pero en el menú turístico para arriesgados, la empresa ofrece otras sugerencias como la práctica de descensos en kayaks o canoas, rutas en bicicletas o actividades subacuáticas.