Dos individuos a cara descubierta lograron hacerse, poco después de las 09.00 de la mañana de ayer, con un botín que puede oscilar entre los 4.000 y los 6.000 euros, tras atracar la sucursal que tiene la Caja Rural de Extremadura en Jarandilla de la Vera. El robo se produjo nada más abrir sus puertas la citada entidad de ahorro cacereña. Para ello los asaltantes amenazaron con una pistola al único empleado que en esos momentos se encontraba en la oficina.

Este último señaló en declaraciones a EL PERIODICO EXTREMADURA que aunque ambos individuos actuaron a cara descubierta, "disimulaban sus rasgos físicos con unas gafas de color oscuro". En cambio no supo precisar la cantidad sustraida por los cacos "ya que tenemos que acabar de cuadrar las cuentas para saber con exactitud el dinero que se han llevado".

Ambos atracadores abandonaron el lugar de los hechos a pie, sin levantar sospechas entre los viandantes de la zona, máxime teniendo en cuenta que ayer era día de mercadillo, al que acuden vendedores y compradores de otras localidades, "por lo que es fácil ver a personas forasteras por la calle", aseguró un vecino.

LA SOMBRA DEL RUBIO

Por otra parte el modo de abandonar el lugar de los hechos hizo que en algunos medios volviera a aparecer el recuerdo de El Rubio . Un atracador que hace algunos años consiguió robar en distintas entidades bancarias de La Vera, Valle del Jerte y Ambroz, hasta que finalmente fue detenido por la Guardia Civil, cuando pescaba en aguas del embalse Gabriel y Galán.

Por último alrededor de las diez de la mañana un cliente se alegraba a las puertas de la entidad de haberse retrasado sobre la hora que tenía prevista inicialmente para efectuar una operación relacionada con la compra de una casa, "ya que traía 12.000 euros encima (unos dos millones de pesetas), y si hubiera venido antes lo mismo me los quitan", comentó el vecino.