Un emblema, uno de los pueblos más bellos de Extremadura, con un conjunto histórico artístico maravilloso que este año vuelve a acoger, y ya van diez, la Ruta de la Tapa. Guadalupe logra con ello el engranaje perfecto que debe guiar el turismo: la gastronomía, la cultura y el medio ambiente. Ayer, el alcalde de la Puebla, Felipe Sánchez Barba, presentó esta iniciativa acompañado por la flamante diputada provincial de Turismo, Patricia Valle, y la gestora cultural del municipio, Rocío Sánchez Cortijo. «Durante estos 10 años ha sido una actividad muy importante que se realiza -dijo Sánchez Barba- con el objetivo de atraer a más turistas, de animar a la participación de los vecinos y de potenciar y promocionar la rica gastronomía del pueblo y del Geoparque» (el parque Geológico de Extremadura, comprendido por 19 municipios entre ellos Guadalupe, un espacio declarado por el Plenario de la Asamblea General de la Unesco Geoparque Mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura.

La Ruta de la Tapa se celebrará entre el 26 de julio y el 4 de agosto. En ella participan 10 establecimientos: Resturante Lujuan, Gastrobar Cerezo, El Mesón de Juan José, Mesón Cerezo II, Tapería Cerezo, Mesón Isabel, Posada del Rincón, Parador de Turismo, Cañas-Copas Chipi y Hospedería del Real Monasterio.

Los establecimientos que participan están identificados con un cartel de la ruta de la tapa y otro de la tapa con la cuál participan, que serán visibles en sus establecimientos. El jurado lo formarán los propios participantes de la ruta, quienes con su voto elegirán la mejor tapa.

SIETE GALARDONES / El ayuntamiento ha previsto para los ganadores siete suculentos premios, ninguno de ellos es en metálico y son los siguientes: una noche en el Parador de Turismo de Guadalupe, en régimen de alojamiento y desayuno, una noche en la Hospedería del Real Monasterio de Guadalupe, en régimen de alojamiento y desayuno, una noche en la Posada del Rincón en régimen de alojamiento, dos noches en el Hostal Alba Taruta en régimen de alojamiento, una cena para dos personas en el establecimiento ganador, por un valor no superior a 75 euros, una visita a las Bodegas Ruiz Torres para cuatro personas con degustación de vinos y cuatro lotes de tres botellas de Bodegas Ruiz Torres (un lote por cartilla premiada).

Las personas participantes solo podrán votar la mejor tapa en la cartilla que encontrarán en cada establecimiento que participe en la ruta o en la Oficina de Turismo de Guadalupe. Para que las cartillas tengan validez se pondrán los sellos de los establecimientos una vez consumida la tapa y las votaciones se depositarán en la urna habilitada en la Oficina de Turismo de Guadalupe, donde se obsequiará con una botella de vino de Bodegas Ruiz Torres a todas las cartillas que tengan selladas el 100% de las tapas de los establecimientos participantes.

EL ESCRUTINIO / El lunes, 5 de agosto, a las doce del mediodía, se realizará el sorteo de los premios entre todas las cartillas válidas bajo la supervisión del ayuntamiento y hosteleros que deseen estar presentes en la Oficina de Turismo. En la cartilla hay que estampar el voto de la tapa elegida, el nombre del cliente y un teléfono de contacto. Cada tapa cuesta 2 euros, y la bebida aparte.

Las tapas son las siguientes. Patata, pollo, mahonesa, aguacate y sala ajil (del Lujuan), Albóndigas de ibérico y ternera, en sala de tomate y acompañadas de patatas fritas (Gastrobar Cerezo), Brandada de bacalao (El Mesón de Juan José), Cabecero ibérico con mermelada de tomate sobre cama caramelizada (Mesón Cerezo II), Tortilla de patata sobre queso, con tomatito y bacon (Tapería Cerezo), Bombón de bacalao al pilpil sobre un lecho esponjoso de brandada y churros de pan de ajo (Mesón Isabel), Crujiente de rabo de toro con espuma de patata trufada (Posada del Rincón), Bacalao en crujiente, salsa monacal y chocolate de Extremadura (Parador de Turismo), Timbal de carne picada sobre cama de patatas (Cañas-Copas Chipi) y Hamburguesa de salmón y sepia, con pan de tomate y salsas de alioli de tinta de calamar y mostaza, acompañada de ajo blanco de pera y queso de los Ibores (Hospedería del Real Monasterio). Ante este delicioso menú, el alcalde no pudo por menos que animar «a disfrutar de unos días agradables y de la gastronomía de la Puebla».