Efectivos de la Guardia Civil de Valdefuentes, tras recibir la correspondiente alerta de la Central de Servicios, se desplazaron hasta las proximidades de una residencia de ancianos del citado municipio, donde los vecinos del lugar manifestaban escuchar aullidos de varios animales.

Junto al geriátrico, los agentes se percataron de que los sonidos provenian de un saco de pienso, en cuyo interior se hallaban abandonados once cachorros de perro, de raza mastín, los cuales emitian sollozos y aullidos. Una vez extraídos los animales del saco donde se encontraban, los agentes constataron que cuatro de ellos habían fallecido y que los animales vivos tenían pocas horas de vida y aún conservaban sangre del nacimiento, según informó el Instituto Armado.

Dada la delicada situación, los agentes hidrataron a los cachorros con una botella de agua mientras se realizaban las gestiones con el refugio de animales San Jorge de Cáceres, donde fueron trasladados y examinados por el veterinario del centro, quién manifiestó que la rápida actuación permitirá que los animales puedan sobrevivir. Por estos hechos la Guardia Civil investiga el abandono de los animales e instruye diligencias por un supuesto delito de maltrato animal, a la vez que se realizan gestiones para localizar al dueño y propietario de los cachorros abandonados.