Las fiestas del toro de San Juan de Coria llegan al ecuador de su programa después de que ayer se celebrara una jornada intensa con la suelta de dos astados por parte de la Junta de Defensa y que afortunadamente se desarrollaron sin incidentes. Por el momento, el único herido grave de las fiestas es un vecino de Coria, de 59 años, que sufrió cinco cornadas por asta de toro en la madrugada del viernes durante la lidia de un astado de la ganadería Jara del Retamar. Según informaron ayer desde la Consejería de Sanidad, el herido "está estable dentro de la gravedad" y sigue ingresado en la Unidad de Cuidados Posquirúrgicos del hospital de Cáceres.
Este vecino, según las mismas fuentes, presentaba fracturas múltiples en costillas, esternón y senos maxilar. Además de traumatismo craneoencefálico y heridas por asta de toro en muslo, antebrazo y abdomen, hasta un total de cinco. Fue intervenido en el hospital de Coria y horas después trasladado a la Unidad de Reanimación Posquirúrgica del hospital de Cáceres. La cogida tuvo lugar en la plaza de la Cava, sobre las cinco y media de la madrugada del día 24. En cuanto a la lidia y suelta por las calles del recinto amurallado del resto de los toros, por el momento, se han desarrollado sin incidentes de gravedad.
Respecto a la jornada de hoy domingo, ésta tendrá como protagonista a la Peña de la Juventud Cauriense, representada por Raúl Perianes, que ha adquirido el toro de nombre Piconero perteneciente a la ganadería Manuel Caro Andrade, de Sevilla. Se da la circunstancia de que es la primera vez que esta ganadería se lidia en Coria. En lo que concierne a la parte lúdica, esta peña ofrecerá dos atracciones. Una es el fútbol burbuja y otra es una deslizadera de 100 metros de lonas de plástico, jabón y agua. Esta resbaladilla permite deslizarse de forma divertida con bañadores y flotadores. A esto se sumará el encierro con carretones y la fiesta de la espuma.
