El pueblo se sitúa sobre una llanura quebrada. La mayor parte de su territorio es ondulado como corresponde a la penillanura trujillano cacereña, con pequeñas elevaciones como los Cerros de las Vacas, Pajarero, Castillejo y la loma de la dehesa. El terreno se hace más abrupto en las cercanías de los riberos del Tajo, en el Almonte, con su conocido encajonamiento.

La población conserva algunos elementos artísticos como la iglesia parroquial de Santiago y dos ermitas: La Soledad y San Marcos. La parroquia es un edificio realizado en sillería con mampostería de pizarra durante los inicios del siglo XVI, aunque presenta algunas reformas provenientes de finales del XVI y del XVIII.

Tiene una sola nave, dividida en tres tramos y con bóveda de crucería. Su interior alberga una importante colección de piezas como un retablo con motivos pasionistas, otro de mitad del siglo XVI con Santa Ana, la Virgen y el Niño y pinturas murales del Dios Padre y azulejos de la Virgen del Carmen. Finalmente, en el presbiterio, pinturas murales y restos del retablo con la imagen de Santiago y de un crucificado.

La comarca de los Cuatro Lugares comprende los términos municipales de Talaván, Monroy, Hinojal y Santiago del Campo, asentándose sobre la amplia penillanura pizarrosa que limita el Tajo por el norte y el Almonte por el sur, cerca de la desembocadura. A pesar de que los encinares constituyen la vegetación potencial, puros en el llano y mezclados con acebuches en los riberos, gran parte de la superficie está drásticamente transformada.

ZONA PROTEGIDA

Así, en los llanos los encinares han sido secularmente aclarados, dando lugar a las dehesas. La naturaleza y la conservación del medio ambiente es, sin duda, uno de los mayores exponentes de esta comarca que se encuadra dentro de la zona ZEPA (Zona de Especial Protección de Aves), donde nidifican las mayores rapaces de la península como el águila imperial ibérica, que tiene uno de sus últimos refugios cerca de Aliseda y la Sierra de San Pedro.

A final de otoño miles de grullas procedentes del norte de Europa llegan para alimentarse a los llanos y humedales de Talaván, Hinojal y Santiago del Campo, de ahí que cada año uno de los acontecimientos más esperados sea el recibimiento de las grullas en los Cuatro Lugares (Hinojal, Monroy, Santiago del Campo y Talaván), ofreciendo al visitante una peculiar visión de la naturaleza y de las tradiciones populares que conforman la idiosincrasia de nuestros pueblos.

Del mismo modo, los corderos de los Cuatro Lugares son reconocidos por su calidad. Son innumerables los productos que esta tierra generosa ofrece al visitante.