La comarca de Sierra de Gata apuesta por ser un auténtico paraíso natural del norte de Extremadura, y ahora se ha propuesto acabar con los problemas que generan los residuos procedentes de las almazaras.
En esta zona se produce un prestigioso aceite de oliva virgen extra y ricas aceitunas de mesa de la variedad manzanilla cacereña, pero la producción de tan deliciosos productos también origina desechos perjudiciales para el medioambiente. Desde hace meses, la comarca perfila los detalles de un plan que pretende levantar una planta comarcal destinada a tratar los residuos procedentes de las almazaras. "Los empresarios del sector lo demandan y es necesario hacer un esfuerzo económico entre todos", explica José Luis Solís, presidente del grupo de acción local Adisgata.
Si a los dirigentes de la zona no les fallan las cuentas, se requerirán unos 700.000 euros para crear esta infraestructura que se ubicaría en un lugar estratégico de la comarca. "Habrá que conseguir una financiación de hasta un 30 ó un 40% de Europa, y el resto deberán aportarlo los empresarios haciendo un gran esfuerzo", añadió.
Este mismo mes, representantes de Adisgata, de la Mancomunidad de Municipios de Sierra de Gata y del sector empresarial tienen previsto reunirse para perfilar los detalles del innovador proyecto. "A los empresarios les está costando dinero la situación en la que se encuentran hoy día. Hemos creado depuradoras, ahora toca tratar otro tipo de residuos", manifestó José Luis Solís. Si el proyecto no se queda sobre la mesa, contribuirá a que Sierra de Gata siga siendo un auténtico paraíso medioambiental.
