El trabajador de Coria, J. B. R. de 56 años, herido de gravedad el jueves después de que explosionara el recipiente con hipocloruro sódico que manejaba, se encuentra ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital San Pedro de Alcántara de Cáceres y su estado "es estable", según contó ayer a este diario Víctor García, director de la fábrica Conservas Alagón SA, donde sucedió el accidente.

García explicó que segundos antes de la explosión la víctima estaba realizando una disolución de cloro con agua, la misma sustancia que se utiliza para las piscinas, para posteriormente llevar a cabo una tarea de limpieza. Añadió que el trabajador, una vez hecha la mezcla en el interior de un contenedor, lo cerró. Al parecer, instantes después, según relata García, tuvo lugar la explosión que seccionó la mano derecha de la víctima y le provocó heridas y quemaduras en los brazos y otras partes del cuerpo.

El director de la fábrica manifestó que ya se ha puesto en contacto con los proveedores del contenedor y del cloro para descubrir cualquier posible anomalía y ha iniciado una investigación junto con el técnico de prevención en riesgos laborales de la fábrica. García aseguró que desde la dirección de la empresa se cumple "con rigurosidad la prevención de riesgos laborales".

La víctima trabajaba en la fábrica como encargado del mantenimiento de las instalaciones y llevaba casi cuatro años.