Esta localidad se erige en un magnífico mirador sobre el tramo medio de la cuenca del río Jerte. Al entrar en el pueblo se pueden apreciar algunos ejemplos de arquitectura entramada de gran belleza, con edificios que dejan al descubierto el tono rojizo del adobe y el ocre de la madera. Sorprenden algunas balconadas corridas entre seis o más casas contiguas.

Así se debe mencionar la iglesia, dedicada a Santa María de Gracia, data del siglo XVI, y posee dos retablos de cerámica talaverana. Recibe el nombre de Valdastillas de los antiguos pobladores medievales que acudían a esta zona en busca de astillas y leños para sus hogueras; éstos reclamaron las tierras y se instalaron ahí dando forma a un pequeño poblado. Así nació esta pequeña población ubicada en la ladera de la sierra de San Bernabé, junto a la carretera que desde Piornal desciende al Valle del Jerte.

A ambos lados de la carretera los bancales artificiales en torno al pueblo poblados de cerezas, denotan la principal actividad de la comarca del Jerte.

ARQUITECTURA TRADICIONAL

Su trazado urbano de calles sinuosas, mantiene una arquitectura popular bastante bien conservada con adobes de barro rojizo y atrevidas solanas que sobresalen de los paramentos. La parroquia de Santa María de Gracia es el monumento más destacado del lugar. Obra del siglo XVI realizada basándose en mampostería y esfuerzos de sillería granítica. Se trata de un templo de dos portadas abiertas en sencillos arcos de medio punto, a los pies y en lado del evangelio, coronadas, respectivamente, por escudos de los obispos Gutiérrez de Vargas y Carvajal Ponce de León.

Al anterior a ambos lados de la capilla mayor, se encuentran retablos de azulejos de Talavera del siglo XVI, dedicados a Nuestra Señora y a la Pasión de Cristo.

NATURALEZA

La naturaleza jerteña, con un microclima excepcional durante todo el año cobra unas características muy especiales en la primavera y en concreto en el Valle, cuando más de 2.000.000 de cerezos plantados en estas bellas montañas abren sus flores y con ello inundan el valle de una increíble imagen nevada que se reparte maravillosamente por las riberas y las laderas de las sierras por donde circula el río Jerte.

De su artesanía destacar las labores de ganchillo que se realizan en al localidad como en otros pueblos del Valle del Jerte.

Otro tipo de artesanía que por la cual se distingue el Valle cereza, es la llamada artesanía comercial , la elaboración de licores y aguardientes, mermeladas, embutidos... y demás productos de alta calidad y elaborados artesanalmente.