El consejero de Sanidad y Consumo de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, asistió recientemente al acto de entrega de una Unidad Medicalizada de Emergencias Rurales en Cañamero, y a la inaguración del consultorio médico de Alía.

Vara destacó la necesidad de este tipo de servicios en zonas como Las Villuercas, con "grandes posibilidades" turísticas y con "cierto déficit" en cuanto a seguridad y posibilidades de salvar la vida en situaciones de emergencia. En sus intervenciones, el consejero agradeció la labor de los equipos de profesionales que atienden a los pacientes y de los empleados del transporte sanitario, para quienes solicitó "cierto mimo y cuidado".

Asimismo, Vara se refirió a las zonas rurales como las principales abastecedoras de sangre, y descubrió una escultura en homenaje a los donantes, realizada por el artista Antonio Martín.

El consejero afirmó que "el sueño" de hace años de dotar a toda Extremadura de unidades de emergencia se está cumpliendo, y en pocos meses los planes previstos se harán realidad plenamente. Fernández Vara tuvo la ocasión de comprobar la dotación de la unidad de emergencia que gestiona la empresa Angeles Amigos en la zona, y comentó entre los asistentes que cuando miró la camilla se le vino a la cabeza la pregunta de cuántas vidas se salvarían con la puesta en marcha de este servicio.

El consejero de Sanidad estuvo acompañado, entre otros, por Carlos Bravo, alcalde de Cañamero, que mostró su satisfacción ante el nuevo servicio, y por Gabriel Archilla, también alcalde de la localidad de Alía.