Una veintena de voluntarios de Arroyo de Luz han fabricado un centenar de batas para el personal sanitario, a través de la plataforma FuerzArroyo. Con sus propias máquinas de coser, se han ocupado de elaborar los materiales de protección con la tela que les ha hecho llegar el SES a través de la Concejelía de Participación Ciudadana.

Entre el grupo de voluntarias hay vecinos de todas las edades, entre ellas Ángela Boyero, una mujer de 84 años y Antonio Pacheco, el único hombre del colectivo y que es tapicero de profesión. Según informa el ayuntamiento, todos coinciden en la necesidad de sentirse útiles con esta tarea y aportar su grano de arena al esfuerzo que está llevando a cabo el personal sanitario. Algunos vecinos están colaborando además cediendo máquinas de coser que no utilizan o donando bobinas de hilo para la confección. Desde el consistorio valoran en una nota el esfuerzo que los voluntarios de esta iniciativa están llevando a cabo.