La atención psicológica se ha convertido para muchos ciudadanos en una necesidad en estos tiempos de confinamiento. El colectivo profesional está muy sensibilizado con esta situación y quiere ayudar a aquellas personas que necesitan de apoyo en estos delicados momentos. Un ejemplo de esta entrega generosa y desinteresada es la labor que desarrolla la Fundación INPA Prosocial, con la colaboración del Ayuntamiento de Casar de Cáceres.

Esta plataforma de psicólogas y psicólogos voluntarios con amplia experiencia clínica se ha puesto a disposición de toda los ciudadanos que estén psicológicamente desbordada para atender las dificultades propias del confinamiento, familiares enfermos, o incluso al duelo. También está a disposición de los sanitarios que lo necesiten, así como de la ciudadanía en general, con especial atención a los jóvenes. «Los jóvenes son un grupo de población que está ya empezando, tras un periodo inicial estable, a mandarnos mensajes pidiendo ayuda». Los correos habilitados para tal fin son psicologiasolidaria@gmail.com y voluntariasparaamar@gmail.com y el teléfono el 680 510 801.

El teléfono que recibe las demandas es un número que ha puesto a disposición del colectivo el Ayuntamiento de Casar de Cáceres. Una voluntaria de Protección Civil, Rosa Holgado, realiza la primera atención al usuario y lo deriva a la plataforma para que decidan cómo se va a abordar el problema. Son los propios psicólogos los que, después, llaman a los interesados.

Desde INPA Prosocial quieren dejar muy claro que la atención psicológica que se les presta es totalmente gratuita y no se les va a cobrar nada, ni siquiera por la llamada, que se realiza desde la plataforma de los psicólogos. «No van a pagar ni un céntimo», explica Guadalupe Andrada, de INPA Prosocial.

En la plataforma hay activos nueve psicólogos que se dedican a esta labor altruista y otros muchos en reserva, por si fuera necesario atender a más población. «Vamos rotando pues hay profesionales que prefieren un tipo de casos a otros», indica Guadalupe.

Perfil del paciente

La consulta más frecuente es la de personas que tienen algún familiar enfermo, confinados o ingresados, o han fallecido por el coronavirus. «También hay mucho sentido de culpabilidad por no haberse podido despedir de sus seres queridos o tenerlos ingresados en la residencia de ancianos. También atendemos a muchos sanitarios que se encuentran totalmente desbordados, que se sienten responsables por no poder abarcar a todos los enfermos. Son trabajadores muy vocacionales», añade la psicóloga Guadalupe Andrada.

«Tenemos que adaptarnos a las nuevas fórmulas de despedida de nuestros seres queridos, anómalas, extrañas y distantes aparentemente, y los psicólogos ayudamos, a aquellas personas que no elaboran bien el duelo. Es muy duro que no se pueda compartir con los familiares que quedan y abrazarse a los hermanos y amigos», aclara Guadalupe.

La psicóloga de INPA Prosocial explica que lo importante es asumir que las cosas se están desarrollando tal y como lo están haciendo. «No podemos pensar en cuándo podemos salir porque eso nos va a crear mucha frustración. Tenemos que pensar esto va para rato, pero el ser humano tiene capacidades enormes de supervivencia y resiliencia. Podemos hacer muchas cosas para pasar bien nuestro confinamiento. Es importante que los padres estén sosegados y serenos. Comprendo que la situación difícil porque además se suman las personas que han perdido o van a perder su empleo. Hay muchas variables, pero lo importante es vivir el día a día. Hay que introducir el baile y la música, los juegos de mesa. No hay que abusar de los videojuegos, porque es un distractor que no da fondo», comenta.

La Fundación INPA Psicosocial ha puesto en marcha los Premios Framaguad para estimular la actividad creadora al que pueden concurrir jóvenes de habla hispana de cualquier país que realicen cortometrajes y videoclips de contenido prosocial.

Toda la información se encuentra en el Facebook de @FundaciónInpaFramaguadProsocial a disposición de quienes quieran participar en este concurso creativo.