El Real Madrid sigue dependiendo de sí mismo para proclamarse campeón de Liga después de vencer esta noche con claridad por 0-4 a un flojísimo Granada en el Estadio Nuevo Los Cármenes.

Dos goles del colombiano James Rodríguez y otros dos tantos de Álvaro Morata en el primer tiempo dejaron el choque ya sentenciado al descanso, mientras que en la segunda mitad hubo ocasiones para ambos equipos pero ninguno marcó.