La nueva Unidad Multidisciplinar de Asma del hospital San Pedro de Alcántara en Cáceres, formada por un equipo de neumólogos y alergólogos, abordará los casos de pacientes con asma grave, no controlada y de difícil control, evitando de este modo duplicidades en consultas y ahorrando tiempos de espera.

Coincidiendo con el Día Mundial del Asma, la unidad ha sido presentada hoy por responsables del equipo que arranca en la capital cacereña y que ya está presente en área de salud de Mérida y se quiere implantar también en Badajoz.

Su objetivo es lograr la mejoraría clínica de los pacientes y permitir una asistencia coordinada, utilizando protocolos comunes para neumólogos y alergólogos, servicios desde los que se derivará a esta unidad a los pacientes, previamente remitidos a estos desde las consultas de atención primaria o urgencias.

Se trata del “germen” de un proyecto que en menos de un año incluirá a pediatras y otorrinos, y que tendrá contacto puntual con otras especialidades como endocrino, psiquiatría y digestivos.

Unos 300 millones de personas sufren asma en el mundo, un problema de salud importante en cuanto al uso de recursos de los sistemas sanitarios, que en España se lleva el uno por ciento del gasto.

En concreto, afecta al cinco por ciento de la población y, en el caso de los niños, a un diez por ciento, siendo la enfermedad crónica respiratoria más importante en la infancia y el segundo motivo de consultas en alergología, solo por detrás de la rinoconjuntivitis alérgica, y por delante de otras patologías como alergias a alimentos y medicamentos.

La responsable de calidad de la Unidad Multidisciplinar del Asma, María Isabel Alvarado, ha informado de que, además de a asmáticos graves, se tratarán a asmáticos no controlados, independientemente de su gravedad, lo que representa el cuatro por ciento de la población asmática.

Además, se contará con una consulta de enfermería para trasladar conocimientos al paciente sobre el autocuidado y el cumplimiento terapéutico; y una consulta de deshabituación del tabaco, puesto que la mitad de los pacientes asmáticos adultos suelen ser fumadores o exfumadores.

“Es un hito importante para el área de salud de Cáceres”, ha expresado sobre la nueva unidad Javier Hernández, jefe de sección del servicio de Alergología.

El asma bronquial, que puede ser desencadenada por alergias o no, es una enfermedad crónica del aparato respiratorio, de inflamación de los bronquios, que obstruyen el paso del aire por una respuesta exagerada a los estímulos y da lugar a síntomas como tos, opresión del pecho, pitidos y falta de aire.

Así lo ha explicado el coordinador de esta Unidad Multidisciplinar, Agustín Sojo, quien también ha señalado que su tratamiento es escalonado, se sube hasta controlar la enfermedad y se termina bajando hasta conseguirlo con la mínima medicación.

Además, a su juicio, es muy importante el uso correcto de los inhaladores y no fumar, puesto que es especialmente dañino en este tipo de pacientes, y cuando es de origen alérgico, evitar todo contacto con la causa que lo produce.

“El asma precisa de un tratamiento farmacológico crónico y diario, aunque el paciente no tenga síntomas, es de vital importancia que tome diariamente la medicación”, ha apuntado Sojo.

Existen cuatro tipos de asma grave, la asociada a la obesidad, neutrofílica, alérgica y eosinofílica, y para estas dos últimas, más del 70 por ciento de las no controladas, son útiles los tratamientos biológicos con anticuerpos monoclonales, una novedad con la que se tratará a una buena parte de los pacientes que pasen por esta unidad.

Según ha apuntado el doctor Fernando Masa, jefe de sección de Neumología, la frecuencia de asma grave es de un 20 por ciento, de los que el 50 por ciento puede no controlarse, por lo que del total de asmáticos podrían llegar a tratarse un cinco por ciento como asma grave.

Este tratamiento, que tiene principios activos que parten de material biológico que bloquean interacciones que activan células y producen inflamación, es bastante caro, pero efectivo en el 90 por ciento de los casos, por lo que sus beneficios superan a los costes, al evitar consultas e ingresos de los pacientes, según ha expresado Masa.