El ayuntamiento entrega a los hosteleros de la plaza Mayor un dossier personalizado en el que se detallan los horarios de las procesiones así como las horas en que podrán mantener montadas las terrazas. Ayer mantuvieron una reunión con el concejal de Seguridad, Rafael Mateos, para ultimar los detalles de cara a la Semana Santa, que comenzará este domingo con la procesión de La Burrina.

Por primera vez los hosteleros tendrán la oportunidad de levantar los veladores solo mientras pase el desfile por sus establecimientos. Se dará la orden de quitarlos media hora antes de que pase y podrán volver a montarlos cuando haya terminado. Hasta ahora los empresarios tenían que quitar las terrazas cuando la procesión salía del templo, lo que suponía estar, en muchos casos, hasta un día entero sin ellas. Los hosteleros aplauden la iniciativa: «Es algo extraordinario. Llevo toda mi vida con negocios en la plaza y nunca había visto esto», indica Emilio Rey, de El Pato. «La coordinación que se ha hecho beneficia a todos, el sector de la hostelería está muy contento porque nos han tenido en cuenta y han sido muy flexibles a la hora de realizar itinerarios», añade.

Para poner en práctica esta novedad cada cofradía ha nombrado a un coordinador de seguridad, que estará en constante contacto con la Policía Local. Se encargará de informar por dónde va pasando la procesión en cada momento, con el objetivo de que los agentes puedan comunicar personalmente a los hosteleros cuándo deben proceder a levantar los veladores. También se informará a los empresarios en caso de que finalmente el desfile no salga por inclemencias meteorológicas. En este caso no necesitarán quitarlos.

Para la alcaldesa, Elena Nevado, la coordinación entre las tres partes (Unión de Cofradías, ayuntamiento y hosteleros) era necesaria: «Será un antes y un después a la hora de gestionar la seguridad y en beneficio para los hosteleros. Si coordinamos tiempos y sabemos el momento oportuno de cuándo pasa la procesión, el perjuicio al hostelero es menor», afirmó.

Los cofrades llevaban años buscando una solución a este problema, para no perjudicar a los hosteleros. «No solo procesionamos en la calle sino que también estamos participando en la vida turística y económica de la ciudad porque, al margen de que la Semana Santa es un acto de fe, una catequesis en la calle, contribuye al desarrollo económico de la ciudad. Por eso cada año queremos mejorar y ganar en seguridad», señaló el presidente de la Unión de Cofradías Penitenciales, Santos Benítez.

Este año se ha preparado un dispositivo de 115 agentes locales y nacionales para la semana comprendida entre este domingo (Domingo de Ramos) y el próximo, Domingo de Resurección, a los que se sumarán los voluntarios de protección civil (DYA y ARA). En el dispositivo ha participado activamente la Unión de Cofradías Penitenciales. De hecho, por primera vez, se ha creado una comisión integrada por miembros de la cofradías y el ayuntamiento (representado por la Policía Local).

CUMPLIMIENTO DE HORARIOS / En esta comisión se acordó, por ejemplo, que en la guía de esta edición se incluyera por primera vez la hora prevista de recogida de las procesiones. Las hermandades tienen el compromiso de cumplirla, para que la coordinación en materia de seguridad sea más efectiva.

Las cofradías han facilitado asimismo otros dos o tres horarios intermedios, es decir, horas a las que se prevé que los desfiles vayan a pasar por lugares críticos. Esta decisión se tomó precisamente para facilitar el trabajo de la hostelería, con el objetivo de que puedan mantener sus terrazas puestas en la calle el mayor tiempo posible. Hay que tener en cuenta que Semana Santa es el momento en el que Cáceres recibe a un mayor número de turistas (este año se espera que lleguen unas 100.000 personas), lo que incide en la economía de la ciudad.

Así un representante de cada hermandad estará en constante comunicación con uno de los agentes locales del dispositivo, al que irá informándole de cómo se va desarrollando el desfile, para que este pueda avisar a los hosteleros y que desmonten la terraza. Esta comunicación servirá también para advertir de posibles imprevistos y de retrasos.

EN CASO DE QUE LLUEVA / Por primera vez también la unión de cofradías se ha comprometido a no demorar más de media hora su salida. Es decir, en caso de previsión de lluvia si la hermandad no ha decidido salir media hora después de la hora prevista, desistirá de hacerlo. Hay también organizados trayectos alternativos (recorridos más cortos o refugios) en caso de que salga y finalmente llueva.

También se ha solicitado a los hosteleros que utilicen vasos de plástico tanto en Semana Santa como en Womad para evitar posibles accidentes por la rotura de los de cristal. Por último, tal y como se ha hecho otros años, se van a repartir pulseras identificativas para que los padres se las pongan a sus hijos en las muñecas. En ellas llevarán escrito el teléfono de uno de los progenitores para que, en caso de que el menor se pierda, se les pueda localizar con facilidad.