No estudian, en la mayoría de los casos porque dejaron demasiado pronto de hacerlo, y tampoco trabajan, bien porque no buscan trabajo, bien porque no lo encuentran. El caso es que España es uno de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) donde hay más jóvenes inactivos, según el informe Miradas sobre la Educación, publicado ayer. Solo tres de los 28 países miembros de la OCDE (Turquía, Israel y México) superan el 22,8% de jovenes entre los 15 y los 29 años que se encuentran en España inactivos y forman el famoso colectivo de los ni-nis. Italia se acerca ligeramente con un 21,1%. Ambos países están lejos de la media de la OCDE (15,2%).

El secretario de Estado de Educación y de Formación Profesional, Mario Bedera, apunta que la situación obedece a las elevadas cifras de paro registradas en España y al tradicional "cuello de botella" que, a pesar de los avances, supone la baja tasa de graduados en FP. El Gobierno, según explica, ha puesto en marcha programas con el objetivo de que los jóvenes sin título se animen a volver a estudiar. También se dan ayudas para poder compaginar trabajo y estudios y se conceden becas compensatorias en la FP para que el joven estudie en vez de trabajar.

ESCOLARIZACIÓN

El problema, según el análisis oficial, sigue siendo el abandono tempranero del sistema educativo, es decir, los chicos que se matriculan en enseñanzas posobligatorias pero no las completan, y los chicos que dejan las aulas al acabar el periodo obligatorio. Para José Manuel Lacasa, director del Instituto de Investigación Educativa, la situación es el resultado de que España es el país de la OCDE que más ha empeorado en educación en los últimos 10 años. En palabras del informe: "La esperanza de escolarización años de estudio entre los 15 y los 29 años ha pasado de 6,7 años en 1999 a 5,6 en el 2009, mientras ha aumentado en más de un año en Alemania y de dos en México". A juicio de Lacasa, este retroceso es consecuencia de las leyes educativas, que han llevado a dejar sin titulación básica a más del 30% de la población y sin bachillerato ni FP a más del 40%. "Este problema --advierte el experto-- se ha enmascarado durante los años pasados porque era fácil encontrar trabajo en un bar o en la obra. Pero no hemos sido capaces de crear un sistema de reenganche y ahora están en su casa mano sobre mano".

El catedrático de la Universidad Pompeu Fabra José García Montalvo atribuye la situación de los jóvenes que ni estudian ni trabajan al elevado desempleo juvenil (46,1%), ±el doble que el general, un problema estructuralO, y a la carencia de una verdadera educación continua. "Su drama es que no pueden trabajar y no ven tan prioritario estudiar porque la rentabilidad relativa no la ven tan interesante", interpreta el especialista en Economía Aplicada. De paso, recuerda que tampoco muchos universitarios quieren más formación porque han visto caer su ventaja salarial con respecto a otros con menos estudios.

HORAS DE CLASE

El informe de la OCDE apunta, según interpreta el Ministerio de Educación, que los profesores españoles imparten más horas de clase que la media de la organización (5 horas diarias frente 4,2). Sin embargo, las horas dedicadas a materias fundamentales no presentan diferencias. Incluso son dos menos a la semana en lengua extranjera y ciencias. "Los docentes españoles no trabajan más. Todos en la OCDE lo hacen entre 35 y 40 horas semanales. En España, 37,5. Lo que ocurre es que los alumnos tienen más horas de clase, por encima de la media, pero lamentablemente se dan menos horas en las materias clave. Es un error muy grave", denuncia Lacasa. Otros especialistas señalan que en España se dan casi 200 horas más en un curso que en Finlandia, país líder en resultados educativos.