Treinta y cuatro personas han perdido la vida en los veinticinco accidentes mortales que se han registrado en las carreteras desde el inicio de la operación especial, siete fallecidos más con respecto al primer fin de semana de la Semana Santa del año pasado, informaron a Efe fuentes de la DGT. En concreto, desde las tres de la tarde del pasado viernes y hasta las cero horas de hoy se contabilizaron veinticinco accidentes mortales, en los que además resultaron heridas graves otras treinta personas y diez leves.

El sábado fue el día en el que se registró una mayor siniestralidad ya que el balance fue de catorce accidentes mortales, veinte fallecidos, trece heridos graves y seis leves. Durante el día de ayer, fueron diez los accidentes que se registraron, trece las personas que perdieron la vida, quince con heridas graves y cuatro leves. El viernes, desde las tres de la tarde y hasta las veinticuatro horas, se produjo un accidente mortal en el que murió una persona y dos sufrieron heridas graves.

El siniestro más trágico se produjo en la medianoche del sábado en la carretera N-I, en el término municipal de Quintanavides (Burgos), en el que murieron cuatro personas, entre ellas dos menores de 13 años. Precisamente, en la gravedad de la siniestralidad en las carreteras de este fin de semana, antesala de la Semana Santa, ha influido el que se hayan registrado más accidentes múltiples.

Tráfico prevé que se produzcan 15,5 millones de desplazamientos de largo recorrido desde las tres de la tarde del pasado viernes hasta el 9 de abril. El año pasado murieron en la operación de Semana Santa 110 personas y fue el Domingo de Pascua (19 muertos) y el Miércoles Santo (15) los días que registraron una mayor siniestralidad.