La intensa lluvia que cayó durante la mañana de este sábado en la capital cordobesa no fue impedimento para que centenares de personas se congregaran en la Plaza de las Tres Culturas, para recordar al joven Francisco Molina, desaparecido el cinco de noviembre del año pasado. La familia del joven Paco Molina, que hoy cumple dieciocho años, --tal y como ya ocurriera en la gran búsqueda de la desaparecida extremeña Manuela Chavero, en Monesterio, el pasado día 15 de octubre--, contó con la presencia y el apoyo de familiares de otras personas desaparecidas, entre ellas, Emilia Chavero y José Moreno, hermana y cuñado de Manuela, respectivamente.

Este emotivo acto, explica José Moreno, al que también acudieron autoridades locales y el presidente de la Fundación Europea por las Personas Desaparecidas QSDglobal, Paco Lobatón, sirvió para volver a reivindicar, un cuerpo especializado en la desaparición de personas, así como la utilización de métodos, protocolos y procedimientos comunes.

Según Moreno, además de la familia de Manuela Chavero, la concentración también contó con la participación de parientes y amigos de otros desaparecidos, como Manuel Ríos, desaparecido en Málaga en 2.009; Juan Antonio Gómez, cuyo paradero se desconoce desde 2.010; o Ángeles Zururera, de Aguilar de la Frontera, desaparecida en el año 2.008

Desde Julio/Esta concentración ha servido además para recordar los cuatro meses desde la desaparición de Manuela Chavero, a quien se le perdió la pista la madrugada del cuatro al cinco del pasado mes de julio en su vivienda de Monesterio. El calvario que desde esa fatídica fecha viene atravesando su familia, se sigue viendo suavizado por las multitudinarias muestras de cariño y apoyo de sus vecinos y vecinas, quienes siguen participando en todas las concentraciones a las que son convocados para atestiguar con su presencia su afecto y solidaridad.

La última de estas reuniones de vecinos se produjo la mañana de este viernes, a instancia de Televisión Española y Antena3 televisión. Esta vez cambió el escenario habitual de la plaza del Pueblo, junto a la gran fotografía con la imagen de Manuela Chavero, que sigue recordando a diario, a quienes transitan por la zona, la ausencia de su vecina; por la puerta del domicilio familiar de Manuela Chavero; una casa que continúa cerrada a cal y canto. En la puerta principal de la vivienda se hace visible el precinto policial que impide el acceso a la misma, a la que desde hace ya más de ciento veinte días sólo han vuelto a entrar los investigadores del caso.

Mientras siguen pasando los días, la familia vive esta situación «como una extraña pesadilla de la que nunca despiertas», confiesan.

La Guardia Civil continúa con sus investigaciones, y de manera paralela, los familiares de Manuela permanecen en contacto permanente con la Fundación QSDglobal, desde donde continúan recibiendo todo el apoyo, de un colectivo centrado en reivindicar que se pongan todos los recursos disponibles al servicio de este problema, así como de incidir en la atención a las familias, ante tan aterrador impacto emocional. H