La devastadora gota fría que desde el jueves azota el sureste español ha provocado hasta el momento cinco fallecidos, 3.500 evacuados, más de 80 vías cortadas, el desbordamiento del río Segura y múltiples fallos en el suministro eléctrico, cancelaciones de trenes, e incluso el cierre de un aeropuerto, según el balance de datos al cierre de esta edición. A los dos hermanos que perdieron la vida el jueves en Caudete (Albacete) se sumaron tres víctimas más a lo lago del día de ayer: la tercera, en Almería; una cuarta en Baza (Granada), cuyo cuerpo fue hallado en el entorno de una rambla y una quinta en Orihuela (Alicante). Además, siguen aumentando los evacuados. Los 1.500 hasta la mañana de ayer se incrementaron en 2.000 por dos pedanías evacuadas por el posible desbordamiento controlado de una presa en Santomera (Murcia). Los daños del episodio se auguran muy elevados cuando comiencen a ser evaluados.

Tras la muerte de dos hermanos en Caudete (Albacete) el jueves, cuando el vehículo en el que viajaban fue arrastrado por una riada, en la mañana de ayer viernes se rescataba el cadáver de un hombre que perdió la vida en un paso subterráneo inundado por la lluvia en la capital almeriense.

La cuarta víctima mortal se registró en una rambla de Baza (Granada): un hombre de 36 años residente en La Jámula cuya familia había denunciado por la mañana su desaparición ante la Policía Nacional. Su cuerpo ha sido hallado por un helicóptero en un lugar de difícil acceso y muy alejado del lugar donde previamente se había encontrado su vehículo.

A última hora del viernes, la Guardia Civil hallaba el cadáver de un hombre de 58 años en una zona de Orihuela (Alicante) anegada por el desbordamiento del río Segura. Según los primeros indicios, pudo ser arrastrado por una avenida de agua cuando acababa de aparcar su coche e intentaba cruzar la calle.

En cuanto a las incidencias por el temporal, el peor en 30 años, el tráfico ferroviario se ha visto alterado e incluso interrumpido en diferentes tramos de la red de Murcia y de la Comunidad Valenciana, y varios puertos de la región se han visto también afectados. El aeropuerto de Murcia ha permanecido cerrado este viernes, mientras que el de Almería ha sido reabierto tras cinco horas con las operaciones suspendidas.

Con precipitaciones que han superado los 400 litros por metro cuadrado en 48 horas en localidades como Orihuela (Alicante), las riadas han cubierto amplias zonas de las provincias de Murcia, Alicante, Valencia y Almería, donde se han sucedido rescates y desalojos.

Se espera que en todo el arco mediterráneo las lluvias torrenciales comiencen a remitir, y la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) prevé que la DANA (depresión aislada en niveles altos) pierda fuelle a partir de hoy sábado en su lento movimiento hacia el norte, aunque las tormentas se extenderán el fin de semana a gran parte del país y especialmente a la zona centro.

Aún así, a las 20.00 horas, la Aemet mantenía el nivel naranja en cuatro zonas de Murcia, incluida la Vega del Segura, por riesgo de precipitaciones de hasta 40 litros por hora durante la noche, aunque la previsión era reducir la alerta a amarilla con el paso de las horas.

solidaridad/ A los familiares de las víctimas y a los cientos de miles de afectados han transmitido su solidaridad en nombre del Gobierno la portavoz del Ejecutivo en funciones, Isabel Celaá, y el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que se desplazó ayer por la tarde a Orihuela. El ministro pidió que se reduzcan al máximo posible los desplazamientos y, sobre todo, ha hizo un llamamiento a la población para se mantenga informada de las previsiones meteorológicas y atienda las recomendaciones de las autoridades., informa Efe

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efecto indirecto de dorian/ El siniestro recorrido por el litoral mediterráneo de una de las gotas frías más devastadoras de los últimos 30 años podría ser un apunte a pie de página de este documento. La DANA, como así la llaman los meteorólogos, ha dejado a su paso desde el pasado martes cinco muertos, más de 3.700 personas evacuadas y daños incalculables en las miles casas, cultivos, comercios e infrastructuras inundados o destruidos en las provincias de Alicante, Murcia, Valencia y Almería.

«Una de las características de la Depresión Aislada de Nieveles Altos (DANA), es su carácter errático. No siguen la corriente general oeste-este, precisamente porque son un elemento aislado. Pueden permanecer en la mismas área o cambiar de dirección varias veces, lo que las hace más imprevisibles», según Ramon Pascual, jefe del Grupo de Predicción de AEMET en Cataluña.

En esta ocasión, este movimientro errático le ha llevado a «pasar dos o tres veces por varias de las zonas afectadas muchas de las poblaciones» con un efecto «yo-yo» descorazonador, en palabras del presidente autonómico valenciano, Ximo Puig. Algo muy poco habitual, como destacaba éste.

Es lo que ha ocurrido en Orihuela (Alicante), la zona cero de estas inundaciones, bloqueda por el agua durante interminables horas y afectada por el desborde del río Segura. Fue de las primera en recibir el primer diluvio del jueves, aguantó otro ayer y sufrió el desembalse de un pantano situado aguas arriba, el de Santomares, que obligó a desalojar dos pedanías. El Segura amenaza también con desbordarse en otras poblaciones, entre ellas la capital, Murcia.

Tres factores han contribuido a hacer más excepcional esta DANA. El primero su origen. «Los restos del huracán Dorian, que arrasó las Bahamas, causaron un impacto en la atmósfera que en latitudes medias provocó esta depresión en la zona mediterránea. Es un ejemplo de efecto mariposa meteorológico», explica Juan José González Alemán, investigador de física de la atmósfera de la Universidad de Castilla-La Mancha, informa M. Vilaseró.